lunes, 6 de julio de 2015

Historias de Gigantes

¿Qué decir de lo que supone "Gigantes" para quienes nos aficionamos al baloncesto en los 90? 

En aquellos tiempos en que Internet era cosa de pelis de ciencia ficción -al nivel de que un español fuera campeón de la NBA y la selección del Mundo e igualara ¡dos veces! la legendaria plata olímpica de L.A. - era nuestra dosis de información que devorar de ese deporte que tanto nos gustaba. 

Gigantes es muy anterior a los 90, sí. Pero en los locos años 80, además de hombreras, heroína y rock radical vasco hubo un boom del baloncesto que permitió la proliferación de muchas publicaciones dedicadas  a la canasta. Pero en mi época ya sólo sobrevivía una de esas cabeceras: Gigantes.

Los tiempos siguen cambiando. Donde antes había technopop ahora hay electrolatino, y ahora Internet es el gran reducto de los amantes del baloncesto. Podemos seguir en directo y con estadísticas y comentarios detallados al instante cualquier gran competición, empezando claro está por la antes inalcanzable NBA donde ya es rutina ver triunfar a los Gasoles y compañía. 

Pero ay amigos, sigue habiendo historias que escapan del radar e historias que merecen ser contadas con un poquito de reposo a ese gente que el resultado ya lo conoce pero ahora quiere saber algo más sobre quienes los han protagonizado. Ese es ahora el rol de "Gigantes" en papel. 

Por lo que, dicho esto... ¡para qué regodearme más en qué supone para mi poder debutar en las páginas de Gigantes!

Lo hago con una historia fascinante, la de Juan Vasco. Muchos me dicen ¿quién? y la respuesta rápida es "el que no te sonaba de España 3x3 en los Juegos de Bakú". 

Una historia por debajo del radar mediático de nuestro basket, que me ha permitido acercarme un poco al fascinante mundo del streetball, pero también de las competiciones FEB amateurs pero donde hay auténticos "historiones". Seguid la pista a Juan en twitter, en @jvasco83 , y lo entenderéis. 

Y por supuesto, para entenderlo mejor, te invito a pasarte por el kiosco y reencontrarte con tu adolescente interior volviendo a pedir la Gigantes como antaño. 

Y no podía terminar estas líneas sin darle las gracias a mi tocayo Santi "Mr Qeu" por ponerme tras la pista de esta historia, y al director David Sardinero por darme un espacio para contarla donde merece. En la revista de baloncesto por antonomasia. 

PD: El karma, sin embargo, ha querido que salga Llull en la portada y que el poster sea el Real Madrid CF de baloncesto ganándolo todo. Y que esta pase a ser la joya de mi colección de Gigantes tiene su guasa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario